Síndrome de Banda Iliotibial

iliotibial

En este nuevo artículo de Fisioterapia Tarso Alcalá, vamos a hablar del Síndrome de Banda Iliotibial.

El síndrome de fricción de la banda iliotibial (SFBIT) es una lesión por sobre uso, causada por una fricción excesiva de la banda iliotibial o (Fascia Lata) sobre el epicóndilo femoral lateral.

Es una inflamación con dolor de la parte externa de la rodilla. Es una afección característica de los corredores de fondo y en los ciclistas. Se trata de una tendinitis de la banda iliotibial que puede acompañarse en algunos casos de una bursitis.

Las causas principalmente son:

  • En la carrera de fondo, la repetición de flexo-extensiones de la rodilla provoca micro lesiones de las mismas fibras colágenas, además de una bursitis de la bolsa serosa situada entre el músculo tensor de la fascia lata y el cóndilo femoral.
  • Correr sobre superficie muy dura (asfalto) o muy blanda (terreno embarrado).
  • Correr en fuertes pendientes (carrera de montaña).
  • Aumentar la intensidad de los entrenamientos de manera inadecuada.
  • Tensor de la fascia que esté muy tenso.
  • Tensor de la fascia corto.
  • Músculos tensos en la cadera, pelvis o pierna.
  • Piernas que no son de la misma longitud.
  • Correr con calzado que está gastado en la parte externa del talón.
  • Problemas relacionados con el pie o la cadera.
  • Piernas torcidas (genu varo).
  • Rotación de la pierna hacia el interior, cóndilo femoral externo prominente.

Los síntomas característicos son:
Dolor que se presenta súbita o gradualmente cuando intentamos correr. Es un dolor que comienza casi al empezar a correr y a los pocos minutos impide seguir. Su intensidad aumenta con las irregularidades del terreno y corriendo cuesta abajo. Cede con el reposo y vuelve con el ejercicio.

Si después de estar sentados un rato se levanta la persona y aparece el dolor.

Cuando hemos andado mucho o hemos estado mucho tiempo de pie.

Está muy localizado en la parte externa de la rodilla, que se irradia a veces, hacia la cara exterior del muslo, extendiéndose bajo el borde inferior de la rótula hasta el mismísimo tendón rotuliano, por lo que puede falsear el diagnóstico.

La mayoría de las veces se siente un «clic» característico que acompaña a la sensación de roce doloroso cuando hacemos zancada, al flexionar y extender la rodilla, por roce con la parte prominente del borde del fémur.

Cuando apretamos la zona externa siguiendo el tracto iliotibial encontramos un punto doloroso externo a la rodilla, a veces solamente cuando la rodilla forma cierto ángulo El borde externo del muslo se siente tirante, y al bajar escaleras se nota algo en el exterior de la rodilla y la tirantez inicial se convierte en dolor, a veces quemante.

Es frecuente que estas molestias aparezcan al aumentar la zancada. Posteriormente, son cada vez más precoces y molestas en actividades cotidianas y su intensidad puede obligar al corredor a interrumpir su actividad.

El tratamiento consiste en evitar o alterar los factores de predisposición, controlar la inflamación, corregir los factores biomecánicos anormales y buscar una reincorporación a la actividad deportiva de manera gradual.

El objetivo de un programa de rehabilitación es que usted pueda volver a practicar su deporte o actividad en forma segura lo antes posible. Si vuelve a practicar demasiado temprano, su lesión se puede agravar, con el peligro de que el daño sea permanente. Cada persona se recupera de su lesión a un ritmo diferente. Su retorno a la práctica deportiva o actividad dependerá de cuán rápido se recupere su rodilla y no de cuántos días o semanas han transcurrido desde su lesión. En general, cuánto más tiempo tarde en iniciar su tratamiento después de tener síntomas, más tiempo tardará en sanarse.

Masaje, maniobras desfibrosantes como la fricción transversa y profunda (cyriax).

Fortalecer la musculatura separadora de la cadera.
Crioterapia, con bolsa de hielo sobre la zona dañada, durante al menos diez minutos. Minutos cada 6 u 8 horas por 2 ó 3 días o hasta que desaparezca el dolor.

Electroterapia, ultrasonido hay una amplia gama de equipos con los cuales su fisioterapeuta podrá tratar este padecimiento.